Norte de Spitsbergen, a lo largo de la banquisa, ballenas Bowhead y osos polares, Solsticio de verano

En este interesante workshop de audio, le proporcionaremos los fundamentos teóricos de varias herramientas acústicas para ayudarlo a localizar e interpretar los cantos de ballenas y focas. Este divertido e informativo taller a bordo cubre tanto la teoría como la práctica del análisis de los sonidos de los mamíferos marinos, sin necesidad de traer ningún equipo adicional.

El Sol de medianoche es un fenómeno natural que ocurre durante los meses de verano. El Sol está visible durante las 24hs del día, con condiciones meteorológicas favorables. El solsticio de Junio (solsticio de Verano) cae un, 21 de Junio de 2023, a las 16:57 hora de Longyearbyen.

“Solsticio” (Latín; “solstitium”) significa “Sol quieto”. El punto en el horizonte donde el Sol sale y se pone se detiene y revierte su dirección luego de este día. En el solsticio, el Sol no sale precisamente en el Este, sino que lo hace hacia el Norte de Este y se pone hacia el Norte del Oeste, lo que significa que está visible en el horizonte por un período de tiempo más prolongado. No será sino hasta finales de Agosto que el Sol se pondrá por algunos minutos.

Viva el Solsticio de Verano cuando el Sol de medianoche alcanza su máxima posición el horizonte septentrional en Spitsbergen.

Llegará a Longyearbyen, el centro administrativo de Spitsbergen, la isla más grande del archipiélago de Svalbard. Disfrute paseando por este antiguo pueblo minero, cuya iglesia parroquial y el Museo de Svalbard son lugares fascinantes. Aunque en los alrededores parece austero, se han registrado más de cien especies de plantas en él. Al anochecer, el barco navega hacia fuera de Isfjorden, donde es posible que pueda ver la primera ballena Minke de su viaje.

Tras una emocionante navegación a través de estrechos y fiordos, llegaremos a última hora de la mañana a Smeerenburg, donde un gran grupo de morsas suele posarse a descansar. A veces, también es una buena oportunidad para ver focas portuarias en islotes rocosos. Smeerenburg fue una importante estación ballenera en el siglo XVII. Más tarde desembarcaremos en Fuglesangen, donde tendremos una gran oportunidad de ver cientos de alcas pequeñas. Por la tarde/noche haremos un breve desembarco en Birgerbukta, donde los balleneros de Basq tenían su estación, y continuaremos hacia el espléndido Raudfjord.

El fiordo Raudfjord, con sus frentes glaciares, es una buena zona para encontrarse con osos polares y focas barbudas en los hielos del fiordo, que aún no se ha quebrado. En Hamiltonbukta hay una impresionante colonia de Guiillemots de Brünnichs. Más tarde visitaremos Ytre Norskøya, una pequeña isla que se utilizó durante muchos años como mirador para los balleneros holandeses. Allí todavía podemos seguir sus huellas hasta la cima de la isla. En la orilla se pueden encontrar los restos de hornos de grasa del siglo XVII, cerca de unas 200 tumbas. El lado norte de la isla ofrece la rara oportunidad de ver frailecillos cerca de sus lugares de cría, también hay una pequeña colonia de gaviotas tridáctilas. Desde allí navegamos hacia el noroeste hasta el borde de la banquisa de hielo.

En el mar, navegando de 80 N a 76 N a lo largo y en los bordes exteriores del hielo en busca de ballenas de Groenlandia, focas arpa, focas de casco, osos polares y aves marinas migratorias como alcas pequeñas, araos de Brünnich y gaviotas. En viajes anteriores por esta zona hemos visto a veces hasta cien ballenas de Groenlandia. El último día, en mar abierto, tenemos buenas posibilidades de ver ballenas nariz de botella y las primeras ballenas Fin de la temporada.

Bellsund es un sistema de fiordos con dos ramas principales (Van Mijenfjord, Van Keulenfjord) y una bahía lateral (Recherchefjord). La geología es fascinante y ha creado paisajes sorprendentes, como la larga y estrecha Isla de Akseløya, que bloquea el fiordo Van Mijenfjord casi por completo. La rica fauna de la zona ha atraído a los cazadores a lo largo de varios siglos, incluidos los balleneros ingleses, que también invernaban allí. - Caminaremos tras sus huellas y veremos restos de sus cabañas. A menudo vemos osos polares y también hemos visto belugas (ballenas blancas) en esta zona, depende mucho del hielo de los fiordos lo lejos que podemos adentrarnos en ellos.

Toda aventura, por muy grande que sea, tiene que llegar a su fin. Desembarcará en Longyearbyen, llevándose a casa recuerdos que le acompañarán allá donde se encuentre su próxima aventura.